Nicaragua Montesol
La Finca
La finca Montesol está situada en Monte Dominico departamento de Jinotega, una de las zonas cafetaleras por excelencia en Nicaragua. En el año 1998 Don Jaime y Doña Ana adquirieron está finca con más de 149 hectáreas de las cuales 112 están dedicadas al cultivo del café. La familia concienciada con el medio ambiente ha preservado el bosque que da cobijo y protege la flora y la fauna. Porque para la familia Rosales Mejía existen tres ejes fundamentales en su trabajo: manejo altamente tecnificado, sostenibilidad socio-ambiental e integración de procesos en la cadena de valor.
En cuanto al manejo altamente tecnificado se logra mediante planes anuales de manejo, buscando producir el mejor café arábiga posible gracias a las características únicas del suelo, la altura y el microclima de la región. La hacienda está comprometida con la mejora continua e innovación para mantener la más alta calidad del café. Si hablamos de sostenibilidad socio-ambiental, la finca ha sido certificada por Rainforest Alliance y además, se complementa esta visión con programas de incentivos laborales y de conservación ambiental.
Respecto a la integración de procesos, desde el beneficio húmedo hasta el pre secado y secado, Montesol ejerce un control riguroso sobre cada etapa del manejo del café, desde la recolec-
ción hasta los sacos de exportación.
Cada año la finca Montesol ofrece trabajo y vivienda a más de 65 trabajadores y trabajadoras permanentes y a 250 a 350 en época de cosecha (noviembre-marzo).
Beneficio
Solo son recolectadas las cerezas maduras y seguidamente son llevadas a la despulpadora. En ellas se elimina la pulpa y el grano pasa por unos canales de agua hasta llegar a los tanques de fermentación. Con tal de eliminar el mucílago el café queda sumergido en agua durante aproximadamente, 24 horas. Pasado este tiempo, el café vuelve a pasar por unos canales de agua para acabar de eliminar el mucílago que pueda haber quedado adherido al grano. Seguidamente, el café es secado en patios, parihuelas elevadas o marquesinas.
Una vez llega al 11% de humedad el café es llevado a la trilladora para estar listo para su exportación.
Origen
Mientras que muchos países centroamericanos fueron descubiertos como productores de café de especialidad durante los años ochenta, Nicaragua todavía era desconocida en la industria en ese momento. Las dificultades políticas y económicas durante este período, como las turbulentas dictaduras, las revoluciones sandinistas, la guerra civil y la era comunista, crearon un alto grado de inestabilidad política y corrupción, que afectó al sector productivo de Nicaragua, incluida la industria cafetera.
Durante el gobierno sandinista, el estricto control económico obligó a los agricultores a vender a precios muy bajos, lo que resultó en una incapacidad para reinvertir en sus fincas. Esto llevó la calidad de la producción de café a niveles bajos. Esto llegó a su fin con el gobierno sandinista, durante la década de 1990, cuando se celebraron elecciones libres. La paz asumió el control político y económico, y surgieron nuevos incentivos para que el capital fluyera hacia la industria del café.
Se han creado nuevos programas que han empujado a los caficultores hacia técnicas innovadoras de producción y procesamiento, elevando la calidad de su café y convirtiendo a Nicaragua en un actor importante en la industria del café especial.
La mayoría de los cafés de Nicaragua provienen de tres regiones dentro de las montañas centrales del norte: Jinotega, Matagalpa y Nueva Segovia. Jinotega es el mayor productor, seguido por Matagalpa y Nueva Segovia, y todos producen deliciosos cafés con características propias.
Nicaragua se adhirió al programa de la Taza de la Excelencia en 2002, lo que ayudó a la imagen internacional del país como productor de cafés de calidad. Nuestro director Salvador Sans participó en aquel concurso (también el 2012) y compró parte del lote ganador.
9,50 € – 38 €
Envío gratuito a partir de 40€ de compra. (Península y Baleares)